¿Cómo hacer un diagrama de flujo para una revisión sistemática?

Si quieres presentar un proyecto que se lleve todos los aplausos, incluir un diagrama de flujo en tu revisión sistemática es siempre una buena idea. ¿Por qué? Quédate con nosotros para saberlo. Te contaremos también cómo armar tus diagramas de flujo, con ejemplos, para que no te queden dudas al respecto. ¡Sigue leyendo!

¿Qué es un diagrama de flujo?

Un diagrama de flujo (también llamado flujograma) es un recurso gráfico utilizado para representar procesos diversos de manera ordenada. Cuenta con símbolos (flechas, gráficos y formas de recuadros) que permiten especificar cada tipo de operación realizada y su papel en el total del proceso. Por su parte, otras cuestiones, como los colores empleados, resultan irrelevante.

El diagrama de flujo, de una revisión sistemática u otro trabajo, se estructura por niveles. De esta manera, permite que la información se organice en función de un principio y un fin. Por lo general, este ordenamiento sigue una lógica temporal.

¿Cómo es la revisión sistemática?

Seguramente ya tienes alguna idea de qué es una revisión sistemática. Sin embargo, para que tengas más en claro cómo se articulan un diagrama de flujo y una revisión sistemática, repasaremos cómo es este tipo de proyecto.

Una revisión sistemática es un tipo de investigación secundaria (es decir, que toma como objeto de estudio otros trabajos académicos). Busca producir una síntesis crítica de los estudios que se han realizado en torno a un tema, a fin de responder una pregunta de investigación.

Para esto, sigue una metodología precisa y reproducible que considera:

• Estrategias para buscar las fuentes de información que utilizará.
• Criterios de inclusión y exclusión para la selección de fuentes.
• Modos de analizar los datos obtenidos.

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¿Por qué usar un diagrama de flujo en una revisión sistemática?

Hay varios motivos por los cuales un diagrama de flujo resulta bastante útil para una revisión sistemática. En principio, al ser sintéticos, estos gráficos generan que quien lea el trabajo pueda entender rápidamente cómo se ha desarrollado la revisión, en tanto proceso.

Así, por ejemplo, un diagrama de flujo en una revisión sistemática permite representar, entre otras cosas:

• El procedimiento seguido para la definición de la pregunta de investigación.
• Los criterios de exclusión e inclusión utilizados para elegir las fuentes de información.
• Las etapas seguidas en la selección de fuentes (las sucesivas cribas que se realizaron).
• El modo en que se recuperaron los datos sobre los que se trabajaría.
• Cómo se realizaron el análisis de datos y la interpretación de los resultados obtenidos.

Por otra parte, este tipo de gráficos no solo facilitará la comprensión de tu proyecto para quienes lo lean. También es un buen modo de prepararte para su defensa. Más allá de servirte como método de estudio, podrás incluirlo en las diapositivas de tu presentación.

Un diagrama de flujo para tu revisión sistemática: Paso a paso

Una vez que hayas realizado tu revisión sistemática, podrás armar el diagrama de flujo correspondiente. De manera general, estos son los pasos que debes seguir:

• Define qué es lo que quieres representar con tu diagrama y qué contenidos incluirá.
• Ordena cronológicamente los elementos que incluirá en el gráfico, en distintas etapas.
• Piensa en qué tipo de diagrama quieres hacer. Revisa el significado de las flechas, recuadros y símbolos que puedes incluir.
• Realiza un boceto del diagrama, tanto en papel como con algún programa virtual.
• Arma tu diagrama, utilizando el software que más cómodo te resulte.

Tu revisión sistemática con diagrama de flujo, según PRISMA 

Quizás no lo sepas, pero las revisiones sistemáticas pueden realizarse siguiendo los estándares especificados por el modelo PRISMA. Este método considera, entre varias otras cuestiones, la inclusión de diagramas de flujo en una revisión sistemática.

Según PRISMA, para realizar un diagrama que represente adecuadamente el trabajo realizado, es necesario:

• Estructurar el gráfico en 3 niveles que representen las etapas del proceso de selección de fuentes en bases de datos, registros y archivos. De arriba abajo: Identificación, Cribado e Incluidos.
• Comenzar el diagrama con los registros identificados. En ese mismo nivel, añadir en otro recuadro los registros eliminados antes del cribado.
• En el nivel Cribado, incluir en recuadros paralelos los nombres de los registros cribados y de los excluidos.
• En una segunda etapa del mismo nivel, ingresar las publicaciones recuperadas para su evaluación. Añadir en otro recuadro las fuentes que no se recuperaron.
• Para la última etapa del cribado, deben figurar las publicaciones evaluadas como elegibles y, en un recuadro paralelo, aquellas que se hayan excluido (con los motivos de la exclusión).
• Finalmente, en el nivel Incluidos, es necesario incluir cuáles estudios y qué nuevos registros forman parte de la revisión. En una etapa inferior, que cierre el diagrama, se añade el número total de estudios y de documentos incluidos.

Ejemplo de diagrama de flujo

A continuación, te daremos un ejemplo de diagrama de flujo. Con él, sabrás cómo puede ser su estructura y qué significa cada tipo de recuadro.

¿Problemas con tu revisión sistemática o su diagrama de flujo?

Imagínate esta situación: después de semanas de estudiar y estudiar, finalmente completaste tu trabajo. Estás listo para descansar. Satisfecho, cierras los ojos y, plácidamente, comienzas a dormirte… Hasta que recuerdas que quieres hacer un proyecto perfecto y que, para eso, debes incluir un diagrama de flujo en tu revisión bibliográfica.

Gruñes de rabia, pero tu frustración va transformándose en desesperación. Te preguntas si hay una solución que te permita liberarte de continuar con tu trabajo sin que este baje su calidad y luego sonríes. ¿Por qué? Pues porque recuerdas que la solución existe, y se llama TFG Online.

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