Aprende todo sobre los artículos académicos
¿Te han pedido la redacción de un artículo académico y no te han explicado mucho sobre cómo afrontarlo? Ocurre más seguido de lo que crees, pero no temas. Aquí nos encargaremos de resolver todas tus dudas al respecto. No perdamos más tiempo y ¡comencemos!
Artículos académicos, ¿qué son?
Se llaman artículos académicos o científicos a aquellos documentos que pretenden exponer, de manera sintética, los resultados de una investigación. Corresponden a un campo del conocimiento específico y están dirigidos a una comunidad científica en particular.
Este tipo de documento se redacta principalmente para revistas científicas. Debemos tener en cuenta que, para ser publicado, el documento previamente debe atravesar un exhaustivo proceso de evaluación. Si es aprobado, se publica. A su vez, si la revista es muy prestigiosa, comparte su prestigio con el investigador. No está de más aclarar que esto es muy importante para la comunidad científica.
El objetivo de publicar un artículo académico es, por un lado, difundir el propio trabajo de investigación, y por el otro, aportar nuevas ideas al campo del conocimiento. Esto, a su vez, genera adhesiones y rechazos, intercambios con otros investigadores, y en el mejor de los casos, la introducción de nuevas ideas.
Recordemos que los campos de estudio se expanden cada vez más y esto tiene que ver, en parte, con la publicación de artículos científicos. La proliferación de nuevas ideas fomenta el progreso, ya sea para afianzar o desafiar las nociones preexistentes.
Hasta aquí hemos abordado la definición y la importancia de estos documentos, a continuación, te contaremos cómo redactarlos.
¿Cómo redactar artículos académicos?
Estos artículos cumplen la función de comunicar a experimentos y resultados obtenidos a otras personas, de manera tal que estas puedan reproducirlos si así lo desean. Claro que todo debe estar acompañado de la correcta fundamentación.
Se redacta de manera impersonal, en tiempo presente, y evitando el uso de calificativos y datos circunstanciales. Por otro lado, la información expresada debe ser rastreable y comprobable, para ello debemos prestar especial atención a las citas bibliográficas.
Por tales motivos, para redactarlo de manera clara, organizada y comprobable, debemos seguir el modelo convencional propuesto por la comunidad científica, esto es, el modelo IMRyD: introducción, metodología, resultados y discusión.
El modelo de redacción IMRyD
Veamos cada uno de estos pasos que conlleva este modelo.
- Introducción: el primer paso para realizar la introducción es describir la problemática trabajada, el motivo de su abordaje y la relevancia de la misma. Luego corresponde introducir los antecedentes verificados y/o el marco teórico que sustenta la investigación. Posteriormente, se enuncia la hipótesis y los objetivos.
- Metodología: en este apartado, lo primero será describir el método de la investigación, con esto nos referimos a si es cuantitativa, cualitativa, o bien, mixta. Luego, se debe expresar como se han recolectado los datos a través de la siguiente información: si ha sido experimental o no, la cantidad y la descripción de los participantes, los instrumentos empleados y el procedimiento que se llevó a cabo.
- Resultados: estos se pueden expresar mediante tablas, gráficos, o simplemente a través de texto. Será necesaria la incorporación de una interpretación personal, pero se debe evitar agregar información irrelevante o circunstancial. La información ofrecida tiene que ser de fácil acceso para el lector.
- Discusión: se deben vincular los resultados con la hipótesis y objetivos planteados al principio. También corresponde hacerlo con los antecedentes e investigaciones previas. Adicionalmente, es buen momento para hacer hincapié en la relevancia de los hallazgos. Si alguna temática abordada necesita mayores desarrollos, se puede apuntar para que sea tenido en cuenta en futuras investigaciones. Además, es conveniente exponer los errores metodológicos y problemas que se hayan presentado, si es que los hubo.
Una vez que conocemos acabadamente los puntos que se deben tener en cuenta para redactar un artículo científico, veremos los diferentes tipos que existen.
Tipos de artículos científicos
Acabamos de ver la estructura de un artículo y ahora veremos sus posibles clasificaciones según el contenido del mismo.
- Investigación original: es el tipo más común, ya que en aquí se desarrolla el informe completo junto con los datos de la investigación. Es funcional para muchos campos de estudio debido al gran aporte de información. También se lo conoce como artículo original, artículo de investigación, o simplemente, artículo.
- Informes breves o cartas: consiste en informes breves que son de utilidad para la comunidad científica. Habitualmente incluyen resultados propensos a modificarse con el paso del tiempo. Sus límites en cuanto a longitud son muy estrictos, lo cual limita el desarrollo de la información.
- Artículos de revisión: como su nombre lo indica, presentan un resumen amplio de una investigación y una perspectiva sobre el campo del conocimiento al cual afecta. Suelen ser escritos por líderes de opinión de un área determinada, a pedido de la revista en la que se publica. Son muy leídas por quienes desean introducirse en una temática y habitualmente citan más de cien artículos del campo de investigación al que pertenecen.
- Estudios de caso: informan sobre casos específicos de determinados fenómenos. El objetivo de estos es darle a conocer determinada información nueva a los demás investigadores del área. Son muy utilizados en medicina cuando se descubre, por ejemplo, una nueva patología.
- Metodologías o métodos: la idea principal de este tipo de artículo es dar a conocer una nueva metodología experimental, prueba o procedimiento. Puede ser completamente nueva, o bien, una variante de una preexistente. Se debe incluir un avance demostrable de la disponibilidad del método descrito.
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